domingo, 11 de enero de 2015

A LA OSCURIDAD DE LA LUNA

Se han consumido todos los cigarrillos; ya no hay quien alumbre esta noche,
la luna está más tímida que nunca, se ha ocultado en la oscuridad de la noche,
Mis ojos cansados de tanto leer recuerdos; recuerdos que yacen inertes en la sombra del pasado,
han empezado a expulsar lágrimas; gotillas, gotas y finalmente aguaceros.
Mojan mis mejillas y mis manos tiemblan cual enfermo de Parkinson.
no hay quien alumbre esta noche, no hay sonora que consuele mis lamentos,
no hay imaginación, tanto que podría insistir en querer volar, teniendo vértigo.
intentaría ser libre, teniendo pánico a la libertad,
y aún así el humo, las cenizas y el olor a tabaco, me consumen cada vez más.
tanto que la hora de partir pueda estar más pronta de lo que tú y yo imaginamos.
Escribiré tantas líneas sea posible, y aun así tu no entenderías nada.
podría componer poesía bella, trágica y espantosa, y ni aun así no acudirías a mi llamado.
La noche es tan oscura, que se asemeja a tu falso sentimiento.
la luna llora a sus hijos, aquellos olvidados y nadie la entiende.
A la oscuridad de la Luna le dedico mis letras, mi tiempo y mi vida.
A la oscuridad de la Luna le dedico mis 5 cigarrillos consumidos a lo largo de estas lineas que nunca entenderás.

Cristhian Lopez Ambrocio, un soñador de quimeras.